Los retos de la adopción
«Adoptar no es un acto de solidaridad». Así lo afirmó ayer en Lugo la psicóloga Lila Parrondo, especializada en adopciones desde hace más de veinte años.
Según comentó la experta -que dirige desde 2000 la asociación Adoptantis-, la solidaridad con la infancia «tiene otros caminos», pero adoptar un niño es un viaje sin retorno, «y no todo es un camino de rosas», reconoce.
La intervención de Lila Parrondo fue el punto de partida de la jornada celebrada a lo largo del día de ayer bajo el lema ‘Los retos de la postadopción y el acogimiento familiar’, que congregó a medio centenar de lucenses en el centro social Maruja Mallo.
La psicóloga disertó sobre el momento idóneo para comunicarle a un hijo su condición de adoptado, «algo que los niños deben saber desde siempre», dijo. «Hay que hablar del tema con total normalidad, como de cualquier otra cosa. Es algo que tiene que formar parte de lo cotidiano de la familia», comentó.
Según Parrondo, uno de los miedos a los que se suelen enfrentar las familias adoptantes es la posibilidad de que alguna parte no llegue a sentir afecto por la otra. «Los padres tienen miedo de que ellos o el niño no sean capaces de quererse, pero las experiencias son tremendamente positivas en prácticamente todos los casos».
Por otra parte, el hecho de que el niño crezca y quiera indagar sobre sus orígenes también suele ser un motivo de preocupación para las familias adoptantes, «pero no se dan cuenta de que los chicos suman y eso no quiere decir que dejen de quererles».
Tras la intervención de Lila Parrondo, las profesionales del gabinete de psicología Paradoxo ofrecieron una conferencia titulada ‘El acogimiento. El reto de nadar entre tres aguas’. Tal y como explicaron ante el atento auditorio, los padres de acogida no deben hacer juicios de valor sobre la familia biológica del niño, «ya que despreciar a su familia es despreciarlo a él».
Otro de los temas analizados por el citado gabinete fue el momento de la separación, «algo que siempre es difícil y que hay que preparar día a día, dejando claro que no es un adiós definitivo», explicaron.
Después de una pequeña pausa, los asistentes pudieron participar en una mesa redonda a cargo de la periodista Beatriz San Román, que abordó el tema de la integración escolar de los menores adoptados. Acto seguido, otra mesa redonda dirigida por la doctora en Filosofía y Ciencias de la Educación Montserrat Freixa, analizó la problemática de los niños adoptados en su etapa adolescente y sus conflictos particulares.
El evento contó además con la presencia de la concejala de Benestar Social e Igualdade del Concello de Lugo Carmen Basadre -quien hizo un balance «muy positivo» de la jornada-,así como de numerosos miembros de la asociación Cheng Bao.
Paula Vilariño
El Progreso (Lugo)