La búsqueda de las familias biológicas en Facebook puede tener un impacto devastador
Un capítulo de la serie “Coronation Street” está poniendo de relieve un grave problema para los niños adoptados y sus familias en la era de las redes sociales
Un capítulo de la serie “Coronation Street”, que narra la historia de la niña adoptada Windass Faye que utiliza Facebook para reunirse con su padre biológico, pone de relieve un tema grave de desprotección infantil que deja perplejo a muchos trabajadores sociales.
Hoy en día, es deseable que haya algún tipo de contacto acordado entre los niños adoptados y sus familias de nacimiento, siempre que éste sea acorde al interés superior del niño. Este podría llevarse a cabo por medio de un «buzón de contacto” (donde las tarjetas, cartas o fotografías se pueden enviar a través de servicios sociales entre los padres biológicos y los adoptados), o las visitas entre hermanos biológicos.
Los niños adoptados suelen conocer los nombres de sus padres biológicos, como un aspecto intrínseco del trabajo sobre su «historia de vida», cuando un trabajador social le ayuda a entender su pasado y su identidad.
Mientras que el “buzón de contacto” garantiza la protección de la identidad de la familia adoptiva y su domicilio Facebook no ofrece ninguna garantía al respecto. Incluso con sólo un mínimo de información, como un nombre, no es difícil rastrear a alguien en Facebook. Con un clic de ratón, una granada de mano emocional puede impactar en el centro de la vida de una familia, y las secuelas pueden ser devastadoras para todas las partes.
El contacto puede ser iniciado indistintamente por los padres biológicos o por el hijo adoptivo, y tanto Adoption UK como la British Association for Adoptive & Fostering expresaron su preocupación sobre como Facebook está siendo cada vez más utilizado para la búsqueda no planificada y sin apoyo para el reencuentro entre la familia adoptiva y la de nacimiento.
Este es un tema muy delicado y hay muchas cuestiones a considerar. Algunos niños pueden acoger positivamente el contacto, pero para algunos pueden ser sumamente preocupante encontrar a sus familias biológicas, y puede resucitar aterradores y desconcertantes recuerdos. Dependiendo de los detalles del caso, puede haber razones de peso por las que una adopción debe mantenerse «cerrada» y sin contacto con los padres biológicos. Algunos niños adoptados pueden fugarse para estar con sus recién descubiertos padres biológicos colocándose, en algunos casos, en circunstancias de riesgo.
La British Association of Social Workers (Asociación Británica de Trabajadores Sociales) está registrando un número creciente de trabajadores sociales que solicitan asesoramiento en redes sociales en relación con este tema, y ha respondido a esta inquietud con la difusión de una política en redes sociales.
Sólo los legisladores tienen la facultad de revisar y decidir sobre cuestiones tales como el impacto a largo plazo de Facebook y cómo afecta a los acuerdos de adopción, sin embargo, como asociación profesional de trabajo social, la BASW ofrece asesoramiento a los países sobre cómo lidiar con el impacto de contacto no solicitado en los niños adoptados.
La regla general es que el Código de Ética del trabajo social debe regir todas sus prácticas, incluso cuando las preguntas están relacionadas con las nuevas tecnologías. Los principios de la comunicación con los niños y los jóvenes siguen siendo los mismos; forjar buenas relaciones debe estar en el centro de todo lo que hacemos.
Como los trabajadores sociales saben, y como madre adoptiva Anna Windass en Coronation Street sin duda descubrirá, prohibir simplemente a un joven el uso de Internet, o hacer el seguimiento del uso que hace, es como querer frenar la grieta de un dique taponándolo con el dedo.
Los trabajadores sociales y los padres adoptivos deberían concentrarse en ayudar a los niños y a los jóvenes a comprender cómo son los acuerdos de contacto con la familia de origen para que sean satisfactorios, y ayudarlos a llegar a un acercamiento con la realidad de su familia de origen y su pasado, sin edulcorar la verdad o demonizar injustamente a las personas.
Lo que todas las organizaciones de adopción y los profesionales del trabajo social deben considerar es la importancia del desarrollo de una relación adecuada entre el adoptante y el niño, que le de al niño la información que requiere en vez de obligarlo a cavar en busca de trozos y piezas que resuelven sólo una parte de un rompecabezas complejo.
Será interesante ver si en “Coronation Street” se animarán a explorar el espinoso tema de la ruptura de las adopciones.
Las investigaciones indican que no ofrecer al niño información precisa y adecuada sobre su pasado es una de las mayores contribuciones para la ruptura de la adopción. Los adoptantes, quizás comprensiblemente, aún luchan con esto, queriendo hacer que el niño sea «de ellos» borrando el pasado. Muchos adoptantes tienen una visión más comprensiva de las familias biológicas, pero preferirían establecer el contacto con mediación.
El encuentro entre los padres biológicos y el niño adoptado normalmente tendrá lugar a partir de los 18 años, e implica mucha preparación y comunicación. La generación actual de adolescentes adoptados es la primera en crecer con Facebook, y con frecuencia están más familiarizados con su uso que los adultos que los rodean. El contacto inicial hecho a través de Facebook dista mucho de ser ideal, pero no se puede detener.
Los trabajadores sociales no pueden darse el lujo de ser indiferente o ignorante con respecto a las redes sociales.
Pero mientras que algunos trabajadores sociales han incorporado las redes sociales en algunas áreas de su trabajo muchos se acercan con precaución en este campo.
Por esta razón, los trabajadores sociales tendrán que considerar el desafío de aceptar las redes sociales como una oportunidad más que como una amenaza para los profesionales y usuarios de sus servicios. Las autoridades locales y otras organizaciones de adopción tienen que estar preparados para participar en este debate y brindar capacitación para apoyar a los trabajadores sociales, o corren el riesgo de colocar a las familias adoptivas frente a una tensión adicional.
Sue Kent
British Association of Social Workers