Adoptantis

Por primera vez se superan los 1.800 millones de personas de entre 10 y 24 años.En España representan tan sólo el 14% de la población, comparado con el 25% a nivel mundial

Es la primera vez, dice Naciones Unidas, que en el mundo habitan 1.800 millones entre jóvenes y adolescentes.

Esta cifra inabarcable supone una cuarta parte de la población mundial. O, visto de otra forma, el equivalente a multiplicar por 3,5 los habitantes de la Unión Europea. Sin embargo, no es ahí donde se encuentra la mayoría de los jóvenes de este planeta.

Según el ‘Estado de la población mundial 2014’, informe de la ONU presentado este martes, el 90% de estos jóvenes se encuentran en países en desarrollo que no ofrecen la atención e inversión necesaria para alcanzar su potencial.

En España es otro cantar. Somos el país con menor proporción de jóvenes del mundo respecto del total de su población, junto con Japón y Eslovenia. Concretamente, los jóvenes de entre 10 y 24 años representan tan sólo el 14% (6,3 millones) de los españoles, mientras que la media mundial se sitúa en el 25%.

Laura Laski, responsable de Salud Sexual y Reproductiva del Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), apuesta por una visión optimista de esta consecuencia del aumento de la población mundial: «No hay que ver el gran tamaño de la población actual de jóvenes como un reto abrumador ni una amenaza, sino como los posibles arquitectos de una transformación histórica del bienestar humano».

La receta de este potencial es sencilla y consta de varios ingredientes: en primer lugar se requieren tasas bajas tanto de mortalidad como fecundidad que fomente el surgimiento de una población joven que pueda impulsar la economía. Pero a este sector en edad activa necesita además acceso a la salud, a la educación y más recursos en inversiones productivas. Todo este caldo de cultivo desemboca necesariamente en una reducción de la pobreza y una mejora del nivel de vida. La UNFPA ha puesto nombre a este objetivo mundial: el ‘dividendo demográfico’. Expresado de otra forma significa que una sociedad tenga más ciudadanos en activo que sin trabajar.

La educación sexual, clave

En la presentación del informe, que ha tenido lugar en la Casa de América de Madrid, se encontraban también Luis Enrique Sánchez, presidente de la Federación de Planificación Familiar Estatal (FPFE) y Pilar Moreno, jefa de la Unidad de Género del Ministerio de Asuntos Exteriores y Cooperación.

Sánchez ha exigido priorizar a la gente joven «porque son el recambio generacional y el futuro de la humanidad». Sobre España, y a pesar de las notables diferencias con respecto a otros países en peores condiciones, Sánchez ha querido destacar la prioridad necesaria para afrontar el 54 % de paro juvenil y las dificultades de acceso a la educación sexual y reproductiva. La FPFE, en palabras de Sánchez, pide que los esfuerzos en España vayan para mejorar la educación sexual, ya que todavía existen «diferencias entre unas comunidades y otras». Y propone medidas concretas, como es la financiación pública de determinados métodos anticonceptivos, como ya ocurre en otros países de Europa.

Apoyo en materia de cooperación internacional

La UNFPA pide a los países prestar más atención a la juventud para que esta cifra, los 1.800 millones de jóvenes y adolescentes, tenga las repercusiones positivas que aclamaba Laski. Por ello, el informe requiere que los Gobiernos atiendan a este sector de la población especificando medidas concretas como el acceso a la salud sexual y reproductiva, ya que todavía en 2013 20.000 niñas de menos de 18 años dieron a luz cada día en países en desarrollo, según la misma organización. La UNFPA también incluye en la lista de tareas de los Estados la creación de políticas públicas que orienten a jóvenes y adolescentes para encontrar oportunidades y empleos dignos, llegando incluso a objetivos más generales como el de «cumplir sus expectativas de vida». Si el 50% de paro juvenil en España supone una de las mayores preocupaciones en este país, mayor es la reflexión necesaria para las regiones en desarrollo, donde el 60% no trabaja ni acude a la escuela, o solo accede a empleos irregulares.

La UNFPA, explica Laski, se encuentra negociando una alianza con el Banco Mundial que está a punto de cerrarse para invertir en educación, salud y medidas de crecimiento en el Sahel.
Laski invita al Gobierno de España a apostar por la cooperación al desarrollo, cuyos presupuestos han caído en los últimos años, como una inversión a largo plazo que tendrá claros beneficios tanto desde el punto de vista económico como para frenar la inmigración que llega a Europa por el Mediterráneo.

El informe 2014 de la UNFPA, publicado este martes a escala global, se difunde anualmente desde 1978. El anterior documento trató como tema principal la maternidad en las adolescentes, un problema lejano para los países ricos, que solo recogen el 5% de los casos, pero que en el resto del planeta provoca 70.000 muertes en adolescentes todos los años por complicaciones del embarazo y del parto.

Verónica Ramirez / Marta Ley

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